Incorporar la perspectiva de Género en los Planes de Acción
Cuando las desigualdades son reproducidas y/o profundizadas por un sistema social, cultural y económicamente dominante y excluyente, se requiere de una acción estatal sistemática y decidida a transformar la forma inherente de su producción y responsable de garantizar el acceso de toda la ciudadanía a los bienes y servicios estatales.
La discriminación que vive la mitad de la población constituye un problema relevante cuya superación es una prioridad del Estado uruguayo ya que, entre otros impactos negativos limita el pleno ejercicio de los derechos humanos del conjunto de la población.
El déficit democrático como consecuencia de la histórica desigualdad de género se revierte, entre otros aspectos, con efectivas medidas públicas centradas no en la neutralidad o ceguera sino en la convicción de que su impacto diferencial en las personas según su sexo, identidad de género y/ u orientación sexual, produce mayores niveles de efectividad en materia de igualdad de género.
La perspectiva de género es una herramienta teórica y metodológica que permite el reconocimiento y análisis de las relaciones sociales y de poder suscitadas entre las personas en función de sexo. Este enfoque permite el análisis crítico de las estructuras, sistemas y políticas que dan lugar a la reproducción o a la transformación de las desigualdades en sus distintas manifestaciones.
Diseñar un Plan Nacional de Gobierno con perspectiva de género es un indicador de madurez del mismo dado que contribuye a revertir las desigualdades estructurales provenientes de las asimétricas relaciones de poder entre las personas de acuerdo con su sexo y/o identidad de género que se expresan en las diferentes esferas de la vida, tanto pública como privada.
Un Plan Nacional de Gobierno Abierto que incluya la igualdad de género desde su diseño establece el próximo desafío y pone en marcha un instrumento fundamental para garantizar un Estado transformador y generador de justicia social.
Constituye un instrumento potente para que decisores e implementadores de política pública obtengan resultados sostenidamente igualitarios en los distintos ámbitos de intervención.
Su alcance integral implica que las acciones allí contenidas, impacten en la ciudadanía de manera tal que el sexo o la identidad de género no constituya una barrera para el acceso a los servicios y/ o productos que ellas produzcan.
Incorporar la perspectiva de género en el seguimiento y monitoreo del 4º Plan de Acción Nacional de GA asegura la presencia del principio de igualdad de género en todo el ciclo de la política pública. Además, de forma atinada y oportuna permite realizar las modificaciones estratégicas y operativas pertinentes para efectivizar las metas trazadas y el logro de resultados tendientes a la igualdad sustantiva.
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Artículo generado por :
Carla Sacchi Cerruti
Directora (e) - Planificación, Gestión y Desarrollo
Instituto Nacional de las Mujeres
Diego Pieri Soria
Responsable -Sistema de Información de Género
Planificación, Gestión y Desarrollo
Instituto Nacional de las Mujeres